martes, 18 de marzo de 2008

Viajar en Semana Santa

añoraba esos espacios vacíos que te permiten viajar sin moverte

viajes sin tiempo, sin tis, sin nadie
viajes interiores-esta soy-aquí estoy
viajes al pasado, al remoto y al de ahora
viajes al futuro en ciencia-ficción
viajes de ensueño, ronroneante, niña
viajes musicales (callar los ojos para que hablen ritmos, compases, notas, acordes)
viajes literarios, de leer lo que te apetece y porque te apetece, y que te cambien un poco, un mucho, un cuánto, un hasta cuándo

a propósito de esto último

Fue por intuición que llegué a ti. Te encontré sin buscarte. Allí estabas, en aquel estante de aquel hipermercado -no importa su nombre-, sin esperarme, sin esperar nada ni nadie, acompañado por clones y otros diseños, otras palabras y otros sueños. Sin embargo, fuiste tú, y no los demás, el que despertó mi empeño. Un título valiente, sugerente: "La aventura de viajar", de Javier Reverte. Un subtítulo extrasensorial, extrafuncionarios, extrarrutinario: Historia de viajes extraordinarios. Una etiqueta poco alentadora: Best Seller. Fue un impulso, sin embargo: Vista-Cerebro-Mano. Deben ser las mejores decisiones:

Pasear sueños:
"Al viajar, paseamos un sueño.

Nostalgias:
"muchos viajamos un poco de la misma manera, necesitados de que nuestros sentidos se comuniquen con nuestras nostalgias. Porque en ocasiones se tiene nostalgia de lo que no se conoce. Esa nostalgia yo la percibo a menudo y pienso que es un sentimiento bastante más común de lo que pensamos en la naturaleza humana.

Sentir:
"El viaje es, sobre todo, una aventura sensual y sentimental.

Desvíos:
"Creo que los mejores momentos de mi vida de trotamundos han sido los que he decidido desviarme de la ruta trazada con anterioridad.

Tiempo muerto:
"El viaje, la aventura, la literatura tienen en su fondo un mismo significado: acercarte al territorio de lo ignorado con el solo bagaje de tu libertad, intentando con ello detener el tiempo. Vano empeño, desde luego. ¿Pero por qué no intentarlo? Como gusta de repetir Claudio Magris, 'hay que tratar de alcanzar el Jordán aun a sabiendas de que no podremos llegar nunca.

Aventura rima con literatura:
"Alguna razón habrá para que la palabra aventura, en algunas lenguas, incluida la nuestra, rime con literatura. En mi caso, creo que viajar me ha ayudado a formarme como escritor, que me ha enseñado en cierta forma a escribir. Y a vivir, claro.

Política vs. vida:
"Desde que dejé el periodismo a tiempo completo y viajé con el ánimo de escribir libros, mirando de otra forma la realidad, no sólo cambió mi literatura, sino mi manera de viajar y creo que, también, a mí mismo. Por encima de todo, me cambiaron las personas que encontraba en el camino, me transformaron las gentes del Sur, y muchas de sus reflexiones me hicieron cuestionarme una buena parte de mis ideas sobre la condición humana y planteármelas de una forma más viva y profunda. Aquellos días de viajes oficiales, en los que recorría las ciudades a bordo de coches de ventanillas oscuras, a toda hora acudiendo a actos oficiales y banquetes, saludando a presidentes y ministros y embajadores, y escribiendo crónicas sin otra sustancia que la política y el protocolo, no me habían aportado otra cosa que un anecdotario más o menos divertido. ¿Pero dónde estaba la vida?

Relatar el alma:
"Viajando, aprendí mucho sobre la miseria, la tristeza y el dolor, pero también sobre la generosidad, la dignidad y la fe. Y decidí que eran estas cosas sobre las que quería escribir y para las que el periodismo me resultaba insuficiente.

Mochila al hombro:
"Y desde entonces, cuando he viajado solo, lo he hecho como él: con una mochila en la que llevo las cosas imprescindibles y usando los transportes locales. Es incómodo, sin duda, pero me conforta el alma, me rejuvenece, me hace sentir que es cierto que viajo, todo lo contrario a que me lleven de viaje.

Renace el niño:
"Y a menudo imagino que me encuentro con aquel niño que se fue a explorar la montaña de Valsaín una tarde de verano y que se topó con una serpiente que dormía la siesta bajo el sol. (...) A ese niño que fui le digo que, durante los años siguientes, mi pretensión más ambiciosa no ha sido otra que estar a su altura.




Próximamente:
"El mejor de los viajes es el próximo.

...

Así pues

"¡Caña y timón a barvolento, contra el viento! ¡A dar la vuelta al mundo!", H. Melville.

by Carmen

1 comentario:

Szarfer dijo...

Me has inspirado y me he hecho un blog. Por supuesto a millas/luz de la calidad del tuyo!